La cúrcuma (cúrcuma longa), es conocida principalmente como un condimento de la cocina.

Le da al curry su color amarillo y es valorado por su sabor delicado, no sólo en su país natal, India sino en todo el mundo.                                    

La Cúrcuma en polvo procede de la raíz que lleva su nombre.                                  

La podemos agregar a todos nuestros platos: sopas, guisos, arroces, zumos vegetales, ensaladas, etc.

Te puedes preparar también una infusión de té verde con pimienta, cúrcuma y unas gotas de zumo de limón.

La cúrcuma es una especia muy usada en India y el sudeste asiático, usada desde la antigüedad, tanto en gastronomía, como en el tratamiento y alivio de diversas enfermedades.

– Problemas digestivos: estimula las secreciones y ayuda a la digestión. Trata la dispepsia, gastritis y malas digestiones. Ayuda en casos de falta de apetito. Y equilibra el PH de organos internos.

– Flatulencia: elimina los gases del intestino. Combate cólicos intestinales.

– Trata problemas hepáticos: es un excelente tónico biliar y favorece el drenaje hepático. Ayuda a la eliminación de piedras en la vesícula biliar. Tiene propiedades anti-inflamatorias.

– Reduce dolores articulares: gracias a sus propiedades anti-inflamatorias, actua en artritis y artrosis.

– Utilizada en trastornos depresivos ya que estimula al sistema nervioso y mejora el estado de ánimo.

– Reduce el colesterol y triglicéridos.

– Estimula al sistema inmuntiario aumentando las defensas.

– Actúa como antioxidante, combatiendo a los «radicales libres»

– Como uso cutáneo, elimina hongos, pie de atleta y combate la psoriasis.